#MIERCOLESCULTURA 15M – JEREZ: “Soberanía alimentaria y relocalización” – Jesús Parra: “Jerez no mira a su propio campo”
Jesús Parra: “Jerez no mira a su propio campo”
Pablo J. Fernández – @PJFernandez
04/05/2014 0 500 Visitas
Aboga por un modelo productivo más sostenible y por flexibilizar un marco regulatorio para cualquier tipo de actividad agraria que permita que nuevos pequeños empresarios puedan simplemente “ganarse la vida”. El autor intelectual del Parque Tecnológico Agroindustrial desarrolla para Jerez el concepto de ‘relocalización’, que abre la puerta a formas más tradicionales de producción y consumo.
“Voy a ponerte un ejemplo. Antes el centro estaba lleno de panaderías. Pero no de barras congeladas. Panaderías donde se hacía pan. ¿Por qué ya no?”, pregunta Jesús Parra. Pero tiene una respuesta. Enmarcado en las charla de ‘Miércoles Cultura’ que el 15M organiza en Jerez cada semana, este ingeniero agrónomo acudió a la cita como experto -es Jefe de Desarrollo Rural en el Ayuntamiento, para el que trabaja- y portavoz de la Asociación de Consumidores y Productores de productos ecológicos y artesanales ‘El Zoco’.
A su parecer, el marco regulatorio actual para cualquier tipo de actividad agraria impide la entrada de nuevos pequeños empresarios, de gente “que sólo busque ganarse la vida”. La ley manda, primero, “que exista una serie de necesidades” que hacen que la primera inversión se dispare. Luego, a través del PGOU, el futuro emprendedor se ve “en la necesidad de buscar suelo industrial. Y el que se oferta suele ser en naves grandes”, de mayor tamaño del que realmente se necesitaría. Más gasto. Que puede provocar, a su vez, la necesidad de “acudir a una entidad financiera”: Futuras deudas. Todo esto quiere decir que el pequeño empresario de la industria agrícola deberá producir a mayor escala para obtener beneficios.
Las administraciones no ayudan. Además de ser responsables del cuerpo legal, no efectúan las medidas que se necesitan. “No hablo de subvenciones”, aclara. La Junta de Andalucía cada vez lo trabaja menos. Podría empezar, a su parecer, por alguna campaña de concienciación en colegios o asociaciones. Porque el concepto base, la relocalización, implica no tanto un cambio de la cultura del consumo como una recuperación de lo que ha ocurrido siempre, que las ciudades se han alimentado de los productos agrícolas producidos a su alrededor. “Es una cuestión de crear comunidad, de poner en valor el patrimonio de Jerez”, mantiene quien es considerado como el autor intelectual del Parque Tecnológico Agroindustrial, un proyecto forjado en los planes estratégicos de principios de los 90.
“Es más fácil en Mercajerez traer un camión de Mercasevilla que comprar a productores jerezanos”, a causa de ese marco regulatorio ya mencionado. Con los gastos, por ejemplo de petróleo, derivados de este sinsentido. Además, indica Parra, “el 60 % de las fincas de Jerez” no tienen muchas hectáreas, con lo que quedan descartadas como productores a escala. Todo esto, podría repercutir en la economía jerezana. Y si se modificara el PGOU, conllevaría la reconversión del casco histórico con la creación de nuevos negocios directamente relacionados con la agricultura, desde una panadería, una quesería o una pequeña bodega. Y cuenta el caso de unos miembros de su asociación que por culpa del marco regulatorio ven imposible su deseo de abrir una cervecería casera en el centro.
Toda esta alternativa se configura, eso sí, desde una visión contraria al neoliberalismo. Si bien, en la teoría resulta coincidente su interés en abrir la puerta al pequeño empresario, considera que las administraciones actúan siguiendo los pasos de ciertos lobbies empresariales. “No creo en teorías de la conspiración”, aclara, pero en este caso hay “una serie de fuerzas”, una suerte de contrapesos, que impiden que se lleven a cabo las políticas nacionales que necesita el sector. Esto, conllevaría la negación del crecimiento infinito liberal y abogar por el decrecimiento. “No podemos ampliar el modelo occidental al resto del mundo, como a África, porque no se puede sostener”, declara. Lo cual provoca, en parte, su pobreza. No existen recursos suficientes. Mientras aquí, en el llamado primer mundo, las ciudades como Jerez no miran a su propio campo.
Jesús Parra: “Jerez no mira a su propio campo”